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La oración y el desánimo (2/2)

Pastor David Yonggi Cho
 

No duden ni un poco del amor de Dios y de la gracia de Jesucristo, echen fuera toda duda, y oren solo por fe


Condiciones para la oración

                                
Una de las cosas que debemos cuidar al orar es el corazón, porque el enemigo nos acusa de día y de noche: No tienes derecho a pedir, tienes demasiados pecados, Dios no oye una oración como la tuya, y trata de cortar la oración incluso antes de que empecemos. No debemos oír sus palabras negativas o no vamos a poder orar. Claro que al orar debemos confesar todo pecado y pedir perdón por ellos. Pecados de soberbia, desobediencia, falta de fe, y no necesitamos hacerlo 10 ni 20 veces . En 1ª de Juan 1.9 dice que si confesamos nuestros pecados Dios es fiel y justo para perdonarnos y limpiarnos de toda maldad. así que díganle al enemigo cuando les acusa: ¿Que tonterías dices? ¡La sangre de Jesús ya me ha limpiado de todo! y así resistirlo con valor.

Cuando mis hijos aun eran niños, un día salí a hacer visitas todo el día. Cuando llegue a casa encontré a mi segundo hijo acostado con la cara morada ¿Que le paso? Cuando los niños salían de la escuela, y como en esa época no había mucho para comer, escucharon que pasaba un carro vendiendo pontegui (galletas coreana hecha de arroz) y la compraron y se la comieron. Pero tenia un fuerte y fatal veneno. Murieron 9 o 10 niños en el barrio, y a mi hijo también le envenenó.
                                                                         
Alguien lo trajo a casa y cuando llegue de noche estaba muriendo. El medico moviendo negativamente la cabeza dijo: El veneno ya ha pasado a todo el cuerpo es muy tarde, le aplicó una inyección y se fue. De veras que tenia la garganta seca para orar, Solo me salía, Señor, Señor, estaba vacío sin valor para nada, Señor, Señor, no podía hacerlo, salí afuera y le dije al Señor: ¡Ayúdame a orar! Estaba desesperado, entonces comencé a arrepentirme de todo pecado, Señor voy a confesar todos mis pecados perdóname y salva a mi hijo.
                                                   
Fui a ver a mi hijo y ya había caído en coma, le impuse las manos y oí la voz de Dios muy clara que me dijo: Dale miel, dale miel, le dije a mi esposa que lloraba: Prepara miel, prepara miel, ¡rápido! Se lo dimos de tomar a la fuerza y al rato comenzó a vomitar y echó una cosa negra, era el veneno y un pontegui que no había digerido, siguió vomitando, y luego recuperó el color de la cara, respiró profundamente y se levantó, ¡se había salvado! En ese estado de desesperación solo sale una palabra: ¿Señor que puedo hacer? En esos casos, lo mejor es arrepentirse de todo pecado, entonces el diablo ya no tiene de que acusarnos, cae el muro que nos separaba de Dios y allí si podemos orar. Debemos arrepentirnos de amar el mundo, de amar lo material como ídolos. Santiago 4:2-3 dice que pedimos y no recibimos porque pedimos mal para nuestros deleites.

Además no debemos dudar de la bondad de Dios, El diablo viene y nos dice: "¡Dios no te oye! se hace que no oye tu oración, te ha abandonado, no puedes hacer nada!" Y ahí empiezan las quejas contra Dios. Dios no es bueno, pensamos que hace excepción de personas. pero nunca debemos dudar de su bondad. De tal manera nos ama que dejo morir a su hijo en una cruz, ¡Jesús nos amó al punto de dar su vida por nosotros! Él no puede hacer excepción de personas ni odiarnos. Dios es todo amor. Santiago 1:6-7 Dice: "el que duda es semejante a las olas del mar que van y vienen y que esa clase de persona no reciba ninguna cosa de Dios".

No duden ni un poco del amor de Dios y de la gracia de Jesucristo, echen fuera toda duda, y oren solo por fe. Juan 15;7 dice que si permanecemos en Él , nos dará cualquier cosa que pidamos. El Señor está más deseoso de darnos que nosotros de recibir. Además, Él nos hace entender cosas grandes y nos sana. Quizás todos hayan leído el testimonio del hermano Park Pion Song diciendo que por segunda vez comprobó el amor de Dios en su vida, una noche llegó a su casa del trabajo, abrió la alacena para sacar un vaso, se cayó y se rompió y le saltó por la pierna cortándole el tendón de Aquiles, Sangraba tanto que tuvo que ir al hospital y lo dejaron allí 4 semanas. tenía que ir por 5 semanas para su curación. El médico le dijo que podía haberse quedado impedido, pero quedó sano. Fue una gran desgracia ese accidente, pero un día que fue para su curación le hicieron un análisis de sangre.

Al ver el resultado el doctor le dice: ¿Es usted creyente? Porque Dios lo ha salvado, Gracias al análisis de sangre y a las radiografías se descubrió que tenia el hígado severamente dañado y que si esa sangre hubiese pasado a las arterias tendría una cardiocrisis y moriría en cualquier momento. Si no hubiese venido ese día al hospital ya estaría muerto. Como usted no viene nunca a hacerse una inspección Dios le cortó los tendones. ¿No es ese un Dios bueno? Ocupado por ganarse la vida no tenía tiempo de cuidar su salud, pero como su hígado ya no aguantaba mas, y la sangre ya no circulaba y podía morir en cualquier momento, por más que se le decía no oraba y no podía oír la voz del espíritu Santo, tuvo que cortarse el talón de Aquiles para que fuera al hospital y le descubrieran su estado y le sanasen. Ese hermano se dio cuenta del peligro de muerte en que estaba y le dio gracias a Dios, hoy día esta totalmente sano! Y no debemos desanimarnos si no recibimos repuestas pronto. Hay que tener paciencia. Soy el pastor y les aliento para que oren, pero si hay un problema cuando oro, lo primero que hago es desanimarme, ¿por que Dios permite esto? Me desespero pensando: ¿Cuándo me va a contestar? Pero oro de día y de noche y sin darme cuenta ya el problema esta resuelto.

Dios esta alrededor nuestro, Él nos quiere dar las respuestas a escondidas. Si después de mucho esperar y no ver respuesta alguna, decimos ¿Cuando se resolvió esto? Y el nos dice. ¿Te sorprendí verdad? En el antiguo tiempo las respuestas se veían por grandes milagros; El cruce en seco por el Mar Rojo, la caída del mana del cielo, pero hoy en día, a veces sin darnos cuenta la respuesta llega. De repente la enfermedad se sana, el problema es resuelto, ocurren cosas buenas, Dios nos trae la respuesta a la noche cuando no nos damos cuenta. Por eso no debemos pensar que el Señor no contesta porque no ocurren grandes cosas. Sin darnos cuenta prosperaremos en todo, tendremos salud, y una vida abundante. Jeremías 33.3 dice: "Clama a mi y yo te responderé y te enseñaré cosas grandes y ocultas que no conoces". Efesios 6:18 Dice: "Que siempre debemos orar por los demás. No olvido el testimonio de una hermana que se convirtió y empezó a orar por toda su familia. Señor; mi padre, mi madre, mi hermano....sálvalos! pasó un año y no había ninguna señal. por lo contrario estaban mas firmes en otra religión.
                                                                    
Ella no renunció, oró por 9 años y se desanimó. Parece que Dios no va a contestarme dijo: ¡Su familia estaba aún peor! y cada vez servían más a otros dioses. Ella pensó que Dios no le iba a contestar, pero asistió a una cruzada donde oyó que el predicador dijo: "oré 23 años para que mi familia se salvara. Y todos fueron salvos! Ella dijo: entonces 9 años no son nada. Avergonzada se arrepintió y siguió orando. Como resultado a los 10 años toda su familia vino a los pies de Cristo. Entonces les pido que no se desanimen y que sigan orando hasta recibir la respuesta. El deseo de Dios para contestarnos sobrepasa a toda imaginación. ¿Cuanto valemos para él, para que su hijo Jesucristo haya derramado su sangre y haya sido desgarrado por nosotros? ¡Hermanos Dios les ama! y están recibiendo ese amor.

Piensen que es un gozo orar de día y de noche. Debemos derribar las fortalezas del enemigo con oración y recibir siempre respuestas del Señor para vivir dándole la gloria.

La oración es una lucha. El cielo se hace fuerte y solo los valientes lo arrebatan dice la palabra. Vivimos en guerra con el enemigo por eso es difícil. Pero si vencemos esa dificultad vendrán cosas buenas con toda seguridad. Amén.

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